ELÍAS CABABIE DANIEL. FOTO TEMPLO DEL DIVINO CLAUDIO |
Hacia el año 54 de nuestra era, en la Corduba romana del lado
norte de la colina Celio, se comenzó la construcción del Templo del Divino
Claudio.
Este templo de grandes dimensiones orientado al oeste, se trata de
un templo hexástilo, es decir, cuenta con seis columnas en el pórtico. En su lateral
lucen otras 10 columnas, siete de las cuáles se encuentran junto a la cámara
interior. Las columnas pertenecen a los estilos clásicos jónico y corintio y
están hechas de mármol blanco, erigidas sobre una base de caliza violeta.
El Templo en honor al emperador Claudio se levantó sobre un gran
pódium de 3.5 metros de altura y fue hecho con sillares de calcarenita sobre
una base cimentada. Su construcción se realizó por órdenes de Agripina, esposa
del emperador.
Los trabajos de construcción iniciados a la muerte del emperador
Claudio, se alargaron hasta concluirse durante el reinado de Domiciano entre
los años 81 y 96. El Templo se dedicó tanto a los dioses del panteón romano,
como al culto imperial del fallecido gobernante.
En la antigüedad el Templo del Divino Claudio colinda con grandes
construcciones realizadas durante la reconstrucción de Roma, como el Anfiteatro
de Flavio, la Escuela de Diocleciano, el Termas de Tito, el Templo de Venus y
los Foros Imperiales.
Elías Cababie Daniel
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