Dicen que cada
cabeza es un mundo, pero hay de cabezas a cabezones que pretende enemistar a la
humanidad entera, más es un alivio saber que la mayoría de seres pensantes son
gente racional, madura y centrada con fuertes convicciones de humanismo y
madures que buscan siempre el avance pro social y verdaderamente evolutivo como
especie.
Y es que las
fuertes declaraciones del presidente Donald Trump, quién pretende poner una
barrera entre nuestro bello país y el vecino norteamericano, ha sacado de
quicio a más de uno. Es por ello que la propuesta de la organización Made
Collective integrada por diseñadores e ingenieros mexicanos y estadounidenses,
ha encontrado otra solución a favor de todos pensando igualmente en el medio
ambiente.
Su objetivo es
completamente contrario al muro delimitante, más bien el proyecto se encargaría
de unir dos culturas en lugar de alejarlas y aunque somos conscientes todos que
es poco probable que éste sea considerado o se lleve a cabo, lo cierto es que
la “esperanza” muere al último.
La propuesta ha
sido bautizada con el nombre de “Shared co nation”, el cual consiste en convertir
la frontera, de un espacio hostil y
desaprovechado a un lugar independiente, cuidando el nivel ambiental en
el que se vive y así poder convivir sin tensiones.
Sería un espacio
abierto de territorio NO incorporado, algo así como una nación libre tanto a
los ciudadanos de México como a los norteamericanos. Pues hay expertos que
aseguran que la construcción de dicho muro representaría un desastre ecológico
para la zona además de las consecuencias ideológicas que arrastraría.
El territorio
ocuparía más de 1.900 kilómetros, abarcando 12 kilómetros a cada lado de la
frontera, uniendo las ciudades de Tijuana, El Paso y San Diego. En cuanto a
nivel ambiental sería 100% sostenible y requeriría la inversión y cooperación
mutua de ambos países para su realización.
Elías Cababie Daniel
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